TÚNEL DE SUEÑOS ROTOS.


Caminaba. Era la muchedumbre quién me llevaba. Sonaba música. A mi derecha, un lata de mejillones a medio acabar, ocupaba el trono que otro nadie había desechado. La música continuaba sonando y no lograba recordar el nombre del autor de la misma. Estaba demasiado abstraído para darme cuenta de que ibas de mi mano. Para ti todo era normal. Gente desconocida en sentido contrario. Mil caras. Una pena por cada cara. Mis ojos querían retener los gestos y las miradas. Demasiada gente miraba al suelo, - ¡Rápido o tendremos que esperar otros dos minutos!-, me dicías. De quién sería esa canción. Continúabamos caminanado y el caminar me envolvía en la mundana ola de almas. Me apretaste la mano fuertemente. Claro que me habías dicho algo, pero es que me había perdido en la canción, "...We all want to be big big stars...". Tantos extraños y tan poca curiosidad. Tantos sueños rotos. Yo llevaba a mi sueño de la mano. Miraba al mundo con los ojos abiertos. Ah! La canción era Mr. Jones. Montado en el veloz transportador de almas solo podía pensar en el dueño de la lata de conservas abandonada. Te miré. Me sentí afortunado. Volví a pensar en esa conserva y sentí que otro sueño desquebrantado agradecería su existencia.